No puedes vivir sólo en tu pequeño mundo.

(Bueno, si puedes, pero aunque seas una lumbrera sería un mundo pobre).

Vivir me apasiona (a quien no) y leer blogs es leer literatura viva, interactiva, tal como lo habia soñado desde chica, cuando al leer libros me preguntaba ¿que habrá querido decir el autor? y queria escribirle y comentarle o hasta darme el lujo de sugerirle visiones alternativas a sus opiniones y cursos alternativos a sus historias.

Asi, leer blogs me apasiona al punto que en cierto momento fue una adicción que consumía horas quitadas al descanso, y eso me pasó la cuenta, por lo que me alejé un timepo. Y es que me cuesta discriminar cuando cada neurona de mi cabeza busca conexiones, mueve el ratón, quiere hacer clicks y digerir bits e ideas, ideas que se acopian, se desbordan, se degradan y finalmente pocas cosas utiles pueden hacerse con ellas (ni recicladas siquiera). Si, en muchos sentidos peco de soñadora y tiro al aire mas que ser una persona de acción. Bueno, muchos son adictos al alcohol, nicotina y cafeina y son tremendos empresarios; es que puedes evaluar proyectos y hasta organizar a tu gente mientras bebes y fumas (como que muchos negocios se cierran en restaurantes), pero no puedes leer y hacer esas mismas actividades al mismo tiempo (¿acaso deberé cambiar de adicciones para lograr mis propósitos?).

Me alejé de los blogs y dejé de leer y comentar, pero ahora volveré, aunque a un paso (quizas mucho) más lento que antes.

Miro mi mundo real, en este momento, más rico que hasta hace poco, y no porque tenga más, sino porque aprecio mejor (algo que me faltaba). Tengo un hijo que me enseña y me deleita con sus salidas, un amor con quien me siento crecer, una familia que me apoya, amigos unos pocos (no tantos como quisiera). No tengo el trabajo que sueño (y como idealista quizas nunca lo tenga), no tengo mi propia empresa como pensé que la tendria cuando recién salí de la U, pero como buena ingeniera, tirando la raya para la suma, puedo decir que el saldo es positivo.

De alguna parte sacaré tiempo para leer, escribir y cumplir con todo lo que debo. ). Para eso es patentaré mis lemas o gritos de guerra ¡¡Coffee omnia vincit!! pero ya que no bebo café, el que (me) produce acidez e insomnio, patentaré ¡¡Chocolate omnia vincit!! (lo confieso, yo soy quien lo agotó en la vendomática de la oficina.

Desde aqui a fin de mes mi meta es visitar a todos los bloggeros que me han escrito y me faltan por visitar. Pues... ¡a mover el raton!